En general, debe considerarse por defecto a todos los verbos como regulares, por lo que únicamente tenemos que aprendernos los irregulares, así como su forma de conjugarlos.
No es necesario memorizar todos los tiempos y formas verbales, ya que los verbos regulares siguen una serie de patrones y reglas generales, que sirven para todos los verbos. Así que lo único que debemos hacer es aprendernos estas sencillas reglas para poder conjugar cualquier verbo (siempre que sea regular).
Un verbo regular es aquel que se conjuga de forma totalmente uniforme, sin modificar su raíz, y empleando las correspondientes terminaciones en cada modo y tiempo verbal, dependiendo de la conjugación a la que pertenecen.
Es decir, un verbo regular es aquel que sigue las reglas y los patrones generales de conjugación.
No es necesario memorizar la conjugación de estos verbos, ya que la misma regla es válida para conjugar cualquier verbo regular, en cualquier forma y tiempo verbal.Por ejemplo, son verbos regulares los verbos amar, hablar, trabajar, comer, aprender, beber, vivir y recibir.
En los verbos en infinitivo, las dos últimas letras son la terminación (-ar, -er, -ir), y el resto es la raiz del verbo, ejemplo: Hablar, Comer y Vivir.
Cada una de estar terminaciones son un tipo de conjugación, y cada tipo de conjugación tiene sus propias reglas para formar todos los tiempos verbales:
Una vez que tenemos la raíz del verbo, conjugar cualquier tiempo o forma verbal es muy sencillo, puesto que sigue una serie de normas y reglas.
Ejemplos para conjugar el verbo en presente:
Yo amo (amar –ar +o) Yo como (comer –er +o) Yo vivo (vivir –ir +o)
Tú amas (amar –ar +as) Tú comes (comer –er +es) Tú vives (vivir –ir +es)
Estas reglas sirven para cualquier verbo regular.